Pasado el mediodía dos personas ingresaron a la asegura que Esser tiene en el Paseo de Los Naranjos y tras no conseguir el dinero que ellos esperaban le pegaron al dueño del local. La policía evalúa si la marca que Esser tenía sobre el chaleco, que el cubría su hombro izquierdo, es producto de una bala.
Los delincuentes pudieron escapar del lugar llevándose el dinero que Esser tenía para pagar el alquiler y las expensas de un departamento de Capital Federal.
La policía arribo de inmediato al igual que un grupo de médicos que quisieron trasladar a Esser al hospital para descartar cualquier tipo de lesión grave pero el herido se opuso y se quedó en el lugar a la espera de los peritos, que arribarían al lugar en busca de una pista para dar con los delincuentes.
